Lamentamos la muerte de Alfred Brendel, una de las figuras más destacadas de la música clásica del siglo XX.
El pianista austriaco falleció ayer a los 94 años en Londres. Artista inclasificable y gran humanista, su estilo combinaba el rigor intelectual con el espíritu poético de forma única e inimitable. Su repertorio era muy amplio, y no sólo destacó como solista, sino también como concertista, colaborando asiduamente con los más importantes directores y orquestas del orbe. Su ingenio, agudeza y extraordinario sentido del humor hacían de él un conversador inolvidable. Su amistad y sabiduría fueron un auténtico privilegio para nosotros.
Alfred Brendel (Wiesenberg, Moravia, 1931) recibió clases particulares de piano de varios profesores durante su infancia, y estudió en el Conservatorio de Graz hasta los dieciséis años, momento en que concluyó sus estudios reglados. Ofreció su primer recital a los diecisiete y, poco después, en 1949, dio inicio a su carrera de concertista tras conseguir el cuarto galardón en el prestigioso Concurso Internacional de Piano Ferruccio Busoni. Ha recibido numerosos premios a lo largo de su carrera, se le han otorgado títulos honoris causa de las universidades de Oxford y Yale, y es Caballero Comendador del Imperio Británico. En Acantilado ha publicado De la A a la Z de un pianista (2013), Sobre la música (2016) y próximamente Milagrería y escalas disonantes.